Manifiesto del Partido Sain sobre Eurovegas

EUROVEGAS
Los recursos de nuestro país han sido expoliados a manos de los especuladores que han hecho de la economía un casino. Con una economía sin perspectivas de recuperación y con perspectivas de no poder pagar la deuda, pues hay que pedir nuevos créditos –al interés que los “inversores” estipulen– para destinarlos en su mayor parte a pagar los intereses acumulados por los anteriores, ya estamos en la espiral del vivir pagando y
morir debiendo. Cuando un país ha sido conducido a un estado de shock económico, aparecen los buitres. Las recientes noticias sobre la instalación en Madrid de un complejo de casinos y en Cataluña de parques de ocio patrocinados por multimillonarios de contrastada trayectoria en negocios oscuros, nos indican que estamos tocando fondo.
Ahora que España va a recibir dinerito fresco, los sectores parasitarios han avistado una nueva forma de hacer negocio. Es la hora de los sueldos basura, las rebajas de impuestos, los horarios comerciales ilimitados, las exenciones legales de todo tipo y de los gobiernos que saben hacer la vista gorda ante el blanqueo de dinero negro, la evasión fiscal, la explotación sexual, etc.
Volvemos a la España de los años cuarenta y cincuenta: economía devastada, caciquismo y corrupción política y social. El trabajo, único generador de riqueza, es sometido a leyes esclavistas mientras se pone alfombra roja a los triunfadores que amasan fortunas a costa de intereses, corrupción y ganancias especulativas.
¿Esta es la salida a la crisis? El impacto económico de estos experimentos ha sido brutal en los países en los que se han instalado. Los casinos facilitan el blanqueo de dinero amasado por políticos corruptos y empresarios con negocios criminales que apuestan fortunas y a las pocas horas se marchan. La prostitución, el narcotráfico y sus correspondientes mafias se multiplican y el gasto público lleva a triplicar la inversión. Mal negocio.
Es una burbuja más que acabará estallando y dejando un enorme agujero económico y
un gran reguero de víctimas. Quieren convertir España en un burdel.
No queremos que nos integren en el circuito de los paraísos fiscales y de la economía criminal a precio de saldo.