miércoles, 24 de septiembre de 2014

Comunicado del Partido SAIn ante la retirada del anteproyecto de la ley del aborto de Gallardón

El gobierno no modificará la ley del aborto: los votos valen más que la vida del no nacido para el gobierno del PP.
“Cambiaremos el modelo de la actual legislación sobre el aborto para reforzar la protección del derecho a la vida, así como de las menores”. Con esta afirmación en el programa electoral, Mariano Rajoy concurría a las elecciones que se celebraron el 20 de noviembre de 2011.
Hoy se ha confirmado la noticia, el gobierno no modificará la actual ley del aborto.
La reforma ha estado siendo cuestionada dentro del partido desde el primer momento, pese a que iba en su programa electoral.
En el PP ya no se plantean si el embrión merece o no protección, no se cuestionan la necesidad del apoyo a la mujer embarazada. Lo único que importa en la sede del PP es el desgaste electoral de esta medida. Esa es la única razón por la que deja esta nueva ley en el cajón. Ante este cálculo electoral ¿cómo quedan los que votaron al PP creyendo la mediocre escusa del ‘mal menor’? Que al PP la vida de los débiles le preocupa poco, lo pone de manifiesto, por ejemplo, la vergonzosa valla de Melilla.
En todo este tiempo de debate sobre el tema se han escuchado los argumentos de siempre pero ni una sola crítica a las verdaderas causas del aborto, ni siquiera a tratar de responder a la pregunta de qué lleva a una mujer a abortar. El debate sobre el aborto debe tener como centro la respuesta a la siguiente pregunta: ¿Es el óvulo fecundado una vida humana? La evidencia científica afirma que es un ser humano distinto de la madre. Si es una vida humana, debe ser protegida. Ese debe ser el papel de la verdadera izquierda: defender a los más débiles. Muchos de los que defienden el aborto reconocen que es un mal. Pero son incapaces de explicar por qué, si es un mal, debe garantizarse su existencia en vez de trabajar por erradicarlo.
Ninguna ley puede aspirar a proteger eficazmente la vida del no nacido y los derechos de la mujer embarazada si no está inmersa en una estrategia transformadora de la política, la economía y la cultura, configuradas hoy por un sistema económico que transforma a las personas en mercancía
Los gobiernos del PSOE y del PP han aquilatado este sistema con sus políticas dictadas por la Unión Europea y organismos antidemocráticos como el FMI o el Banco Mundial al servicio de las multinacionales y la banca. El aborto, verdadera forma de violencia contra los niños, las mujeres, las familias y los pueblos, ha sido impuesto a nivel internacional por todo un entramado institucional imperialista y antidemocrático, como forma de control demográfico de los empobrecidos.
Desde el Partido SAIn seguiremos luchando contra las causas del aborto para que el vientre de la madre sea el lugar que la naturaleza ha querido que sea, el más protegido y para que la sociedad sepa acoger y cuidar a los niños, antes y después de nacer.